El Gobierno sostiene que Lupa coordinó con el destituido comandante del Ejército Juan José Zúñiga toda la logística de ingreso a la plaza Murillo.

El militar boliviano Vladimir Lupa Salamanca, acusado de liderar a los francotiradores durante el intento de golpe de Estado en Bolivia, el pasado 26 de junio, fue enviado a la cárcel con prisión preventiva, informó el Gobierno del país andino.

«Lamentablemente, esta persona ha movilizado efectivos militares en contra de la democracia de nuestro país, trataba de tapar documentación dentro de sus instalaciones militares», informó el ministro de Gobierno, Eduardo del Castillo, en una conferencia de prensa.

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De acuerdo al alto funcionario,  Lupa estaba al frente del grupo de fuerzas especiales F10, de la unidad de Cotapachi, en la región central de Cochabamba.

Del Castillo aseguró que, según Inteligencia de la Policía, Lupa viajó en un avión militar, de Cochabamba a La Paz, con cinco militares más y con armamento que, supuestamente, debía ser utilizado durante el alzamiento armado.

Asimismo, manifestó que este coordinó con el destituido comandante del Ejército Juan José Zuñiga, líder del intento de golpe, toda la logística de llegada y de ingreso a la Plaza Murillo para instalar a los francotiradores en la sede presidencial de La Paz.

Ya hay once personas en detención preventiva, acusadas por los delitos de terrorismo y alzamiento armado contra la seguridad y la soberanía del Estado.

El fiscal Franklin Alborta, responsable de la comisión que investiga los sucesos del 26 de junio, precisó que son investigadas alrededor de 30 personas, entre civiles y militares.

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